Artículos de peluquería que no deberían venderse al consumidor final

Años atrás, las tiendas de peluquería solo podían vender sus productos a otros profesionales del sector. Ahora, la crisis que asola todo el mundo, la sobreinformación, las innovadoras campañas de marketing y las nuevas formas de mostrar y vender los productos han hecho que cualquier persona pueda comprar en peluquerías profesionales sin conocimiento alguno de química.

No debemos olvidarnos que, en muchas ocasiones, el fin único de las empresas es vender sin distinción entre sus clientes y, en este caso, sus necesidades capilares.

Por ello, Aquarela Centro de Belleza Capilar se ha convertido en un centro de recuperación capilar. Porque la demanda de melenas dañadas han aumentado mucho  y grande parte de esa demanda fue porque no hay restricciones de estos productos  estar a la venta para el consumidor final, pues no dejan de ser productos que pueden ocasionar consecuencias graves para la salud de nuestro cabello.

En particular, hay tres artículos que debería estar limitado al uso profesional.

• Planchas para el pelo

En principio, podemos pensar que el mecanismo de una plancha para el pelo es sencillo, de hecho, lo es. Sin embargo, se ha normalizado tanto la venta de este artículo que no llegamos a ser conscientes del mal uso que hacemos de ella.

A lo largo de nuestros años de experiencia, podemos afirmar que el mal uso de este aparato es una de las causas que más daño provoca en el pelo de nuestras clientas. Día tras día, insistimos en que el planchado no debe buscar un alisado perfecto, pues esto es irreal y, cuanto más planchamos el cabello, más provocamos la debilidad en su estructura. 

Cuando no sabemos cómo funciona realmente una plancha, no tenemos en cuenta que necesitamos realizar una serie de cuidados pre y post alisado basados en la protección térmica del cabello. Aunque existan planchas con placas que, dentro de lo que cabe, protegen más la transmisión del calor sobre el pelo, el cuidado debe ser extremo, y su venta a través de una formación específica u orientaciones de profesionales. Así pues, podemos afirmar que la plancha está dentro de los artículos de peluquería que no deberían venderse al consumidor final, pues siempre terminamos con el pelo dañado y, los fabricantes, con su facturación garantizada. 

• Productos de decoloración y tintes

Entre los daños más comunes en el cabello, siempre se encuentran, en un gran porcentaje, los causados por los artículos de decoloraciones y tintes. En este caso, solo los profesionales pueden determinar cuánta decoloración soporta un cabello, cuánto tiempo deben dejarlo actuar y qué agua oxigenada debe usarse.

Cada pelo y cada textura funciona de una manera y, si no sabemos cómo aplicar un tinte correctamente, nos exponemos a riesgos como manchas, quemaduras, rotura, inflamaciones, caída e incluso alopecia.

Cuando compramos un producto de este tipo, nos hacemos con una mezcla predeterminada, no personalizada para nuestro cabello en concreto o sin un estudio anterior y, si no sabemos aplicarlo y cuidarlo de una manera correcta, las consecuencias pueden ser graves.

Los tintes y las decoloraciones son artículos de peluquería que no deberían venderse al consumidor final porque existe una profesión que ha sido formada para utilizar bien dichos productos. Los profesionales han pasado por muchas horas de estudio para saber trabajar con la química. Y no os contamos más cuando ya hablamos de profesionales que recuperan melenas dañadas. Sus estudios con la química son muy profundos , lo que hacen con que busquen siempre el mejor para ti y para tu melena.

• Productos con tecnología PLEX

Este es un asunto bastante comprometedor ya que, por un lado esta lo que dicen las grandes empresas de cosméticos y por el otro lado estamos nosotros, profesionales de peluquería responsables de la recuperación capilar.

Antes de llegar la tecnología PLEX como revolución en peluquerías, los profesionales debíamos estudiar bien la capacidad del cabello en recibir una decoloración sea por mechas o sea por cambio de color.

Ahora, con esa tecnología nosotros profesionales podemos trabajar de maravilla con la decoloración porque nos ayuda a frenar hasta un 98% de rotura durante el proceso químico. De esa manera, se llegan a hacer verdaderas obras primas consiguiendo tonos planitos o blancos sin destrozar el pelo como era antiguamente.

El hecho de que esta tecnología sea efectiva para mantener los puentes del cabello unidos evitando que el pelo se rompa durante el proceso de decoloración,  su mal uso da lugar a problemas de gran importancia. Cuando utilizan los productos de tecnología PLEX de manera diaria, el pelo llega a saturarse hasta endurecer la hebra a tal punto, que en pocos meses podrás notar que el pelo si esta rompiéndose a parte de que tampoco puede absorber las hidrataciones.

Las clientas que tienen daño en su pelo causado por una decoloración están desesperadas por frenar esa rotura. Acaban por comprar productos con la terminación PLEX porque los medios de comunicación y vendedores prometen que el pelo va a recuperarse.

¿Sabéis qué pasa con el cabello?

A través de un falso efecto de recuperación capilar, el pelo se endurece. Si la clienta sigue usando estos productos, a los pocos meses volverá a tener roturas y no será por las mechas, sino por la rigidez de la hebra. El pelo no absorberá ningún tratamiento, ya sea de queratina o una simple hidratación, lo que hace que el pelo no recupere sus vitaminas y agua que tanto necesita para combatir la sequedad del cabello.

Las compañías de cosméticos quieren vender. Y el simples hecho de que ese producto es maravilloso para su uso en la peluquería, no significa que deba ser vendido al consumidor final.

Chicas, un pelo NO SE RECUPERA con la rigidez de la hebra. Se recupera cuando devolvemos la masa capilar a nuestro pelo a través de una reposición de masa. El hecho de que la tecnología PLEX mantenga los enlaces de hidrógeno y azufre unidos no quiere decir que haya recuperado el pelo.

¿Quieres ver cómo tu pelo está sufriendo rigidez con los productos con terminación PLEX?  Observa si ha recuperado el brillo. Si tu pelo tiene brillo es porque el tratamiento lo esta recuperando en profundidad. En cambio, si sigue mate, es porque el pelo no está sano aunque no presente aspecto chicloso.

Como hemos resaltado anteriormente, el fin único de la mayoría de empresas es vender sus productos y destacarse en el mercado a través de campañas que, en muchas ocasiones, no son reales. Si queremos mantener nuestro cabello sano utilizando este tipo de productos, debemos consultarlo siempre con un profesional y aprender tanto a usarlos como a cuidar el pelo en nuestro día a día.